Cómo mantener impecable tu fregadero de acero inoxidable
Para mantener impecable tu fregadero de acero inoxidable, es importante limpiarlo regularmente con agua tibia y jabón suave. Utiliza un paño suave o esponja para evitar rayar la superficie y luego sécalo con un paño limpio para prevenir manchas de agua.
Evita utilizar limpiadores abrasivos, estropajos metálicos o lana de acero, ya que podrían dañar el acabado del fregadero. Para darle brillo, puedes aplicar unas gotas de aceite mineral con un paño y luego pulirlo suavemente. Siguiendo estos sencillos pasos, tu fregadero de acero inoxidable se mantendrá impecable y reluciente por mucho tiempo.
Consejos efectivos para prevenir y eliminar rayones en tu fregadero de acero inoxidable
- Usa un limpiador suave: Evita utilizar productos abrasivos o esponjas ásperas que puedan rayar la superficie del fregadero de acero inoxidable.
- Seca el fregadero después de su uso: Elimina residuos y agua estancada para prevenir la formación de manchas que puedan convertirse en rayones.
- Utiliza protectores de goma en el fondo: Coloca protectores de goma o almohadillas en el fondo del fregadero para evitar que los utensilios causen arañazos al contacto con el metal.
- Aplica pulidores especializados: Para quitar rayones leves, existen pulidores diseñados específicamente para el acero inoxidable que pueden restaurar la apariencia del fregadero.












